Durante toda tu vida profesional puedes tener diferentes tipos de jefes. Tienes que aprender a identificar cada perfil de jefe para saber como tratar con él. Aquí os dejamos un listado de los 8 tipos de jefes en el trabajo que puedes encontrarte:

 

Para poder llegar a ser un buen jefe lo primero que se debe hacer es confiar en el equipo que se tiene, pero hay algunos que no lo hacen. Si te encuentras con un tipo de jefe así puede anticiparte y enviarle todos los trabajos que hayas realizado, incluso los trabajos más sencillos. Así poco a poco irás incrementando su confianza en ti y dejará de revisar todo el trabajo que hagas.

 

  • Jefe quisquilloso

Este tipo de jefe siempre te dirá que hay cosas que tienes que mejorar, y todo lo que no esté hecho de manera perfecta deberá ser cambiado. Ten paciencia, aprende cómo quiere que se realicen los trabajos e intenta aportar todas las ideas posibles para trabajar de manera conjunta.

 

  • Jefe adicto al trabajo

Estos jefes sólo piensan en su vida laboral, ya que sobreponen el trabajo a su propia vida personal. Intenta aprovechar lo máximo posible tus horas de trabajo. Además podéis revisar las tareas de manera conjunta e invitarle a tomar algo después de trabajar para que ambos desconectéis y poder tener así una buena relación y más cercana.

 

  • Jefe indeciso

Un jefe tiene que ser capaz de tomar decisiones. Si el tuyo es de los que ni si quiera sabe si quiere un cortado o con leche, estate tranquilo. Esto te ayudará a que aumente la confianza en ti mismo ya que tendrás que tomar tus propias decisiones, y podrás demostrar de lo que eres capaz. No dudes de tu instinto, sino acabarás volviéndote loco.

 

  • Jefe inexperto 

Si esta persona está ejerciendo como jefe por primera vez o es nuevo en la empresa, necesitará que le ayudes y le orientes para poder integrarse.

 

  • Jefe conformista

Este tipo de jefe es de los que piensa que si los resultados hasta ahora conseguidos han sido bueno, no hay que cambiar nada. Trata de hacerle ver que realizando pequeños cambios se pueden conseguir resultados todavía mejores. Demuestra de lo que eres capaz.

 

  • Jefe colega

Si solo se acerca para hablar contigo sobre sus planes para el finde o para salir a fumar o tomar algo, y no viene a hablar de trabajo, no le des demasiada confianza porque no debes olvidar que se trata de tu jefe y no de tu colega. Intimar demasiado con tu jefe te convertirá en su confidente.

 

  • Jefe ideal

Aunque nadie es perfecto, puedes encontrar a un jefe que sea el ‘casi’ perfecto. Si tienes la suerte de tener un jefe que tenga iniciativa, te ayude en tu trabajo, proponga ideas para crecer y tenga un buen trato contigo, ¡aprovéchalo! Esto te puede ayudar a crecer mucho profesionalmente.