Las Redes Sociales llevan unos años acaparando nuestras vidas, a veces más de lo que quisiéramos. Todos sabemos los diferentes usos que podemos darle a ellos y aunque a veces tengan una mala reputación, podemos sacarle mucho partido tanto a nivel laboral como personal.

Para empezar, les mostraremos los beneficios que nos aportan las redes sociales, como es la capacidad de conectar con millones de usuarios en tiempo récord, abriendo así nuestro círculo de personas, mejorando la comunicación en general. El segundo punto que más destaca es la gran cantidad de información que nos proporciona sobre diferentes temas siendo para muchos la principal fuente de información diaria.

Como hemos comentado anteriormente, las redes también tienen una mala reputación, ya que pueden llegar a ser adictivos. Lo primordial en cuanto a las redes sociales es saber desconectar.  Nuestro cuerpo necesita descansar tanto física como mentalmente, sobre todo en vacaciones. El “postureo” que tanto daño nos está haciendo en los últimos años nos hace que subamos fotos y vídeos retransmitiendo todo lo que hacemos y visitamos durante las vacaciones. Esto puede traer otros peligros como los robos en domicilios o robos de identidad, usando el contenido que creamos para otros propósitos. Otro de los problemas que deriva del mal uso de las redes sociales es la necesidad de feedback que le crean a la gente en busca de esa aceptación virtual, muchas veces incluso de desconocidos. Esto nos puede crear frustraciones y ansiedad al compararnos con los demás personas que seguimos, aun sabiendo que no todo lo que vemos en redes es real y puede estar manipulado.redes sociales

Por último, es una buena idea tener dos cuentas para poder separar mejor nuestra vida personal y laboral, por ejemplo en Instagram o Twitter. Es recomendable que la cuenta personal sea privada y tengamos a personas que conocemos como amigos o seguidores. ¿Y esto por qué? Porque las empresas tienden cada vez más a buscar a los preseleccionados de las entrevistas por redes sociales para ver su entorno y filosofía de vida en busca de más información. El Curriculum Vitae de ahora es más que un simple documento, nuestra identidad digital es la clave y para ello tenemos que cuidarlo, ya que es difícil empezar desde cero en cuestiones de Internet. En nuestras redes sociales profesionales, como LinkedIn, mostramos un perfil que nos ayude profesionalmente a buscar trabajo, un perfil que creamos que sea adecuado para el sector donde queremos trabajar, pero nunca mintiendo sobre nuestras cualidades o cualquier otro tipo de faceta nuestra. Evitaremos dar una opinión radical sobre temas de política y religión, siempre teniendo en cuenta que las empresas en donde aspiramos trabajar puedan llegar a ver el contenido que publicamos.

Para terminar, decir que un buen uso tanto personal como profesional de las redes nos puede beneficiar de muchas formas y que nos puede ayudar a encontrar trabajo. Por lo tanto, teniendo en cuenta estas pautas podemos lograr que nuestra identidad digital sea adecuada y poder sacarle provecho.

Equipo de Trabajos.com