Todos sabemos que hay que asegurarse de tener un buen currículo a la hora de postular para una vacante. Nuestra experiencia debe estar bien redactada con una explicación de lo que nos ha aportado y lo que hemos aprendido. Sin embargo, ha cambiado un poco lo que valoran las empresas al contratar.

Como indican en el estudio de Gloria Caballero y María Jesús López-Miguens mencionado en RRHH Digital, los “soft skills”, habilidades blandas o habilidades sociales tienen gran importancia en los procesos de selección.

Entre las primeras características encontramos la creatividad, la responsabilidad profesional y la iniciativa personal. Generalmente, mostrar estos rasgos en el CV es muy complicado, por lo que intenta mostrarlas en la entrevista personal mostrando ejemplos que lo demuestren.

Además, se valora mucho la capacidad de relacionarse con la gente, la capacidad de negociación y la capacidad de liderazgo. Tras la pandemia, donde hemos estado todos en nuestras casas, hemos valorado las relaciones personales. Por ello, aprovecha en las entrevistas para demostrar que tú tienes las habilidades para relacionarte con tus compañeros de trabajo, clientes y proveedores.

Sabiendo esto, intenta no centrarte tanto en todos los títulos o estudios que tienes y muestras las habilidades sociales que valoran las empresas al contratar. No dejes de lado lo académico, pero trabaja en estas habilidades pues son útiles tanto en el ámbito profesional cómo en el ámbito profesional. La inteligencia emocional se valora cada vez más y repercute en todos los ámbitos de nuestra vida.

Te animamos a que trabajes en ellas y las muestres en tu próxima entrevista.

Si quieres más consejos para tu próxima entrevista, echa un vistazo al artículo “cómo realizar una buena entrevista”.