Una entrevista puede llegar a ser un foco de nervios para aquellas personas que están en búsqueda de trabajo. Aunque cada persona es un mundo, es inevitable tener un mínimo de cosquilleo en el estómago cuando nos enfrentamos a un superior y tenemos que demostrar que somos los adecuados para cubrir el puesto de trabajo a la que estamos aspirando. Cierta gente lo pasa realmente mal, por lo que hemos decidido daros unos consejos si eres el tipo de persona que no puede controlar los nervios en situaciones como la mencionada.

  • En general, para cualquier tipo de situaciones en la que podamos padecer un nerviosismo agudo, es importante controlar tu respiración. Hacer respiraciones adecuadas te ayudará a calmarte y a mantenerte en paz contigo mismo. Podemos también hacer ejercicios de relajación como la meditación o yoga.
  • No te obsesiones con los nervios, no intentes ocultarlos, ya que esto no ayudará a que los nervios desaparezcan, sino que todo lo contrario. Evita pensar en ello y céntrate en otras cosas.
  • Prepárate la entrevista bien es fundamental, tendrás más seguridad y eso hará que no estemos tan nerviosos. Ensaya en casa o con alguna persona cercana, simulando una entrevista real. Prepárate las preguntas típicas que te pueden hacer para que no te pillen de sopetón.
  • No se acaba el mundo, sé tú mismo y vete con la verdad por delante. Piensa que es una simple reunión. Si por casualidad no te cogen, será porque tu sitio no estaba allí y vendrá algo mejor a posteriori.
  • Mira bien donde es la entrevista y ten claro que lo tienes todo bajo control (cómo ir, donde aparcar, a qué hora salir de casa para llegar a tiempo…) para poder llegar a tiempo y no tener ningún retraso adicional.
  • Descansa bien para poder dar lo mejor de ti, la higiene del sueño es muy importante.

Después de seguir estas recomendaciones para controlar los nervios, ¡te deseamos la mejor suerte del mundo en tu siguiente entrevista de trabajo!